Notas sobre la presentación de "Le Nozze di Figaro" de Mozart en Monterrey
Ahora que hemos podido digerir el gran éxito que constituyó el estreno en Monterrey de “Le nozze di Figaro” de Mozart (¡Tras más de 220 años de su estreno! Vaya que a Monterrey llega rápido el arte), quisiera aprovechar este espacio para anotar algunos puntos que me gustaría compartir contigo. La ópera se presentó el 20 y 22 de noviembre en el Auditorio Luis Elizondo. Las fotos de esta entrada me fueron amablemente obsequiadas por mi amigo el fotógrafo Eduardo González.
No se trata de una crítica en el sentido de aquella que me publicó “El Norte” en la sección vida el pasado 21 de noviembre (y que se pudo leer en papel y en Internet) sino más bien una serie de apuntes que pueden ilustrar lo que ha dejado este par de noches históricas y que replantean en gran medida la forma de afrontar y hacer ópera en Monterrey.
- La SAT con Hugo Garza al frente han realizado un trabajo excepcional en la producción de “Le nozze” pero bastante deficiente en el promocional. Esperemos que esto sirva para evaluar esas áreas de oportunidad.
- Las voces regiomontanas tienen los medios adecuados para cantar Mozart. Rossini, Haydn, algunas cosas de Donizetti, algo del repertorio francés pero no tanto Verdi, Puccini y otros de esta índole. Debemos de entender que nuestras voces son líricas en gran medida.
- ¿Cuántas óperas de repertorio no se han estrenado en Monterrey? Cosi fan tutte, Pecheurs de perles, Entfuhrung, Fra Diavolo, Cenerentola, Italiana in Algeri, Manon, Don Quichotte, Cendrillon, por mencionar solo unos cuantos títulos excepcionales que bien podrían realizarse en Monterrey.
- Rosendo Flores es orgullosamente nuestro artista internacional del momento y con unas cuantas frases y la cultura de su sonido nos hizo reconocer y disfrutar su elite, pero hay otros artistas que no están lejos de nuestro bajo barítono; Oziel Garza Ornelas, Cristina Velazco e Ivette Pérez atraviesan momentos importantes. Creo que es tiempo de darle a Ivette la oportunidad de estelarizar una ópera. ¿Alguien que quiera aportar el dinero para montar un Barbero de Sevilla? Comuníquese conmigo: info@trofonio.com
- Ivonne Garza fue de menos a más en las funciones de “Le nozze”. Su Porgi amor lució tonalmente desarticulado pero hay que consignar que su “Dove sono” fue de un alto grado e factura. En una evaluación total su interpretación fue muy disfrutable. Lástima esa peluca estilo Amanda Miguel que no le ayudó. Lució, por otro lado, fenomenal en la escena del jardín. Esa es la Ivonne que conocemos.
- Rafa Blásquez cantó ambas funciones con gripa. Como el bajo regio es todo un profesional jamás utilizó esto como excusa. Hay quienes notaron un registro alto bastante irregular pero creo que es justo comentar este detalle. Lo cierto es que Blásquez es un buen actor cantante, sobretodo del género buffo (aunque no se le puede minimizar en el repertorio serio). Cada vez más estoy convencido que debe de cantar los Basilios, Bartolos, Mustafas, Pasquales, Alfonsos, Dulcamaras y demás. Avemus Buffo. Nadie puede hacernos reír con más clase que Rafa.
- La batuta de Lucy Arner fue refrescante. Cuando en Monterrey nos obstinamos a que una misma batuta dirija todas las óperas oficiales (detalle que algunos de los asistentes comentaron) es un deleite encontrarnos con una artista que tiene una verdadera sensibilidad hacia este género. Su generosidad y compenetración con el estilo mozartiano lo disfrutamos ampliamente.
- En mi crítica de “El Norte” dije que me proclamaba uno de los nuevos seguidores de Cristina Velazco, aquí lo vuelvo a asentar por escrito. Por más que algunos colegas y conocidos han comentado sobre su voz pequeña, su amaneramiento, la realidad es que Velazco es una artista de gran inteligencia, sólo canta lo que debe. Definitivamente es una soubrette que tiene un gran repertorio por delante. Su musicalidad y entonación ya eran conocidos pero ahora ha refinado incluso su actuación. Como bien dice mi amigo Gabriel Rangel, “Le nozze di Figaro” bien se pudo llamar también “Le nozze di Susanna”
Comentarios
La dirección musical estuvo a cargo de Lucy Arner. Es notable su entendimiento del género. Siempre mantuvo a la orquesta a un volumen moderado, protegiendo muy bien a los cantantes. Por cierto, haría bien nuestro "director perenne" en seguir su ejemplo. La eleccion de tiempos siempre fue adecuada, evitando extremos. Si acaso, me parece que pudo ser un poco más enérgica en algunas entradas... pero tampoco es recomendable arriesgar cuando la orquesta no es tan fiable. Hablando de la orquesta, a pesar de algunos detalles, me parece que hicieron un papel muy decoroso, sobre todo considerando que son un ensamble casi amateur. El clavecín estuvo bastante activo
Entre los solistas, el más destacado fue Rosendo Flores. Siempre se vio confiado, dueño del escenario. A mi gusto su timbre es un poco obscuro para el papel, pero no tuvo problemas vocales para sortear el rol de Fígaro. Fue notable una entrada fuera de tiempo en el último acto, pero a cualquiera le puede pasar.
La Susana de Cristina Velazco fue buena. Se puede criticar su voz chiquita, o sus cambios de voz al atacar agudos. Pero también se debe aplaudir su suficiencia para manejar el papel, tanto en los vocal como en lo histriónico.
El conde de Oziel Garza no me convenció. Su tiembre no es lo más hermoso, y su voz sufrió bajo presión desde el segundo acto. Pero sacó bien su aria "Hai gia vinto la causa" y es notable su entusiasmo.
Ivonne Garza tuvo una condesa dispareja. Su tipo de voz, con un vibrato tan acentuado, no es lo ideal para Mozart. En su segunda aria (Dove sono) lució bien, pues requiere más dramatismo. Por cierto, tal vez fue mi imaginación, pero me pareció que invirtieron el orden del "Dove sono" y la escena del juicio.
Ivette Pérez estuvo bastante bien en el rol de Cherubino. Su voz no tiene el peso de una mezzo completa, pero estuvo excelente dentro de su papel. Además, su actuación fue muy buena, evitando las exageraciones de mal gusto tan camunes en un rol travestito.
El Bartolo de Rafael Blasquez fue deficiente. Ahora me entero que no se encontraba en condiciones adecuadas de salud. Lástima.
El resto de los papeles tuvieron una actuación discreta. El aria de Basilio fue suprimida, dejando sólo un papel de declamador. Por cierto, su representación escénica fue una especie de "Chabelo", muy lejos del viejo adocenado que debería encarnar. A Marcelina también le cortaron su aria. Y Barbarina estuvo bien, con una agradable presencia sobre el escenario. El coro, bien a secas.
El vestuario y mobiliario fueron discretos, pero eficaces. Pero tengo mis críticas a la dirección escénica. Me pareció demasiado chabacana, incluso para el estándar local. Acepto que Marcelina le haga una seña grosera a Susanna, pues puede cuadrar dentro de la concepción del papel. Pero no puedo estar de acuerdo en un bailecito tipo cancan, o que los personajes escondidos en jardín "graciosamente" cambien de árbol a cada momento. Las Bodas de Fígaro es una de las grandes óperas cómocas del repertorio, por las situaciones equívocas y por la genial música. No es una pachanga de Offenbach.
Estoy totalmente de acuerdo en lo que mencionas sobre la deficiente promoción del evento. Estuve hablando al teatro con frecuencia, y apenas 3 días antes de la función me pudieron dar la información. Lamentable.
Acerca de las obras que no se han estrenado en Monterrey, desde luego falta casi toda la obra de Wagner, Strauss y gran parte del siglo XX. Pero el Don Quichotte ya se representó en la ciudad una temporada del sexenio de López Portillo. Recuerdo que el papel protagónico correspondió al inmenso (literalmente) Arnold Voketaitis.
Saludos.
E Sauceda
gracias por compartirnos tu punto de vista en este sitio. Agradezco también la apreciación sobre el Quijote de Massenet, una obra de gran belleza. En cierta forma la había introducido en el listado porque en esta ciudad siempre nos hemos dado de gran admiradores de Cervantes.
En general me parece que concordamos en la mayor parte de los aspectos. Desafortunadamente el espacio que se me dio en "El Norte" fue insuficiente para hacer una apreciación más detallada.
Totalmente de acuerdo con las entradas en falso (Oziel también se atrasó en la entrada de "Contessa perdono")y en general no hay mucho que diferir en cuanto a la apreciación de los artistas. Ivonne Garza no estuvo en su momento por más que Alejandro Fernández siempre escriba bien de ella.
El cuarto acto no me gustó mucho en cuanto a propuesta y resultado escénico. Lo de los árboles fue chabacano y ridículo. El trazo de Falcó se perdió en ese cuadro bastante mal logrado.
Este gran suceso debería por el contrario desprender el ánimo para seguir promoviendo desde todas las trincheras el esfuerzo por realizar mas títulos de ópera en esta ciudad en vez de estar agarrando a estos maravillosos artistas orgullosamente locales como "monitos" de tiro al blanco, que si gallaron o no que si entraron a tiempo o no...por Dios!! acerque mas con su pluma estos valores artísticos al público y abstengase de secundar a sepultureros y enterradores del género como este "Cretino Sr. Sauceda".
Marcelo Lucio.
San Pedro, Garza Garcia
Gracias por el comentario que me dejaste en "La Gruta". Discúlpame la sinceridad con la que voy a responderte;
Me parece que tus palabras provienen más de un "fanático de artista" que de alguien que leyó a profundidad lo que he estado escribiendo al respecto de "Le nozze".
Concuerdo contigo en que Ivonne Garza tiene un gran arte pero esto no significa que todas sus funciones estén al mismo nivel. Para comenzar te puedo decir que su Traviata o Voix Humaine estuvieron muy por encima de su condesa. Aún así he detallado y rescatado algunos momentos que me parecieron muy bien logrados en la función. Puedes regresar a mi escrito original.
Sobre Cristina Velazco, no tengo por qué protegerla de alguna forma o sentirme magnánimo por hablar bien de ella. Es el claro ejemplo de una artista que ha trabajado mucho y su trabajo se nota sobre el escenario. Si a ti no te gustan las voces pequeñas, elegantes, "soubrette" como he dicho lo respeto pero Velazco ha hecho una Susanna sobresaliente y el público lo supo reconocer también con la ovación más calurosa de la noche.
Para finalizar me gustaría que me indicaras dónde he utilizado a nuestros artistas locales de "tiro al blanco".
Mi crítica y apuntes indican y dicen claramente que esta serie de funciones fue un éxito. Pero un aplauso sin matices no construye, por el contrario nos mantiene en el conformismo. Cuando hablo de algo que no me gusta lo fundamento. Las personas que me leen tienen el derecho de estar de acuerdo o desecharlo. De eso se trata la crítica. Tu has ejercido tu derecho de estar en desacuerdo y lo respeto.
Creo sin embargo que has leído muy entre líneas lo que escribí y no es justo que le "carguen muertitos" a alguien cuando no los hay.
Haciendo a un lado los ataques personales, los argumentos que presenta el Sr. Lucio son dos:
1.- La soprano Ivonne Garza tiene un gran arte, por lo tanto, la crítica realizada la sobaja.
2.- La crítica debería promover la ópera, aplaudiendo al esfuerzo los artistas locales en lugar de mencionar sus fallas.
El primer argumento es una falacia lógica. Aún considerando cierta la premisa, la conclusión sólo refiere a la autoridad de la cantante, sin considerar el caso particular de la función de la semana pasada. Esto es, títulos en lugar de argumentos. Imagine que el Sr. Marcos le dijera "Tengo mucha experiencia sobre el tema, así que debe aceptar mi crítica". Sería un absurdo, muy similar al que usted plantea. La actuación de Yvonne Garza como la condesa debe evaluarse en sus propios méritos, no en base al concepto que alguien tenga sobre su carrera.
Reitero mi punto: En mi opinión el instrumento de Yvonne Pérez es más adecuado en papeles dramáticos. Dentro del repertorio mozartiano puede intentar a Doña Anna o a Vitelia, pero prefiero escucharla cantando Verdi, Puccini y ópera moderna. Desde luego, esta es mi opinión personal y usted tiene todo el derecho de discrepar.
El segundo argumento que presenta el Sr. Lucio se relaciona con la filosofía de la crítica. Es un tema muy extenso que nos aleja del tema operístico, intentaré ser conciso.
El crítico tiene que transitar entre dos extremos: Aplaudir todo lo que ve, y ensañarse con todos los defectos que encuentre. Ambos enfoques tienen sus problemas. Ser demasiado indulgente nos impide ver los puntos a mejorar. Conozco casos de muchachos talentosos en mi área de trabajo, cuyo éxito temprano y críticas favorables los han vuelto displicentes. Por otra parte, la crítica excesivamente dura trae desánimo, y a veces le pone etiquetas a los cantantes que se convierten en lápidas que deben cargar por muchos años.
Por ello, el crítico debe ser equilibrado. Debe mostrar los puntos más destacados de los cantantes, pero al mismo tiempo señalar los problemas que deben superarse para mejorar. Desde luego, debe hacerlo con honestidad, no inventando falsas virtudes o defectos sino plasmando las verdaderas características de cada cantante según su mejor entendimiento.
Así, en mi opinión menciono lo que me pareció mejor de cada cantante y lo que no me gustó tanto. Desde luego, algunos cantantes me agradaron más que otros, y eso se refleja en mi crítica. Pero no veo ataques injustificados, o "tiro al blanco" como usted aduce. Lo único que me pareció lamentable fue una parte de la dirección escénica, y expongo mis argumentos.
Sobre el apoyo al género, he asistido a la mayoría de las funciones locales desde hace muchos años. Conozco el esfuerzo que implica montar una ópera, sobre todo después de las temporadas de principio de los 80s. Desde el Elíxir que pusieron unos jóvenes Acosta, Bailey, Rosendo y Katia/Negrete, pasando por las temporadas con el maestro Guadagno, alguna función en el foro procultura, las ópera-conciertos, las funciones de la Facultad de Música, el esfuerzo de pro opera, y ahora el SAT. En muchos casos han sufrido para conseguir los apoyos, becas y patrocinios; a veces los muchachos han puesto de su propio bolsillo para poder presentar una ópera. Conozco las situaciones que han atravesado y tienen mis simpatías por seguir presentando ópera en Monterrey. Pero tampoco puedo dejar que mis simpatías nublen mis ojos (u oídos, en este caso).
En fin, usted tiene todo el derecho de no compartir mi punto de vista. Pero no entiendo su calificación de "enterrador del género", cuando el resumen de mi crítica es: en general me parece loable la representación.
Saludos,
Eduardo Sauceda
Les reitero mi apreciación acerca de sus críticas, si así se les puede llamar. El método de tiro al blanco por si les queda duda de ustedes mismos, es poner en fila y por nombre a cada uno de los artistas y dispararles a su desempeño de manera insolente y hasta ignorante, de ninguna manera son “aplausos matizados”. Por otra parte creo que incurren en una forma por demás rupestre y cavernícola en su método de apreciación estética, el típico y pobre: "Me gusta....no me gusta...me gusta...no me gusta". No veo un sentido ni una forma estéticos en sus conceptos. Sr. Marcos, lo seguiré mejor en El Norte ya que observo que en ese medio es Usted mas coherente.
Marcelo Lucio
Tendremos que aprender a estar en desacuerdo en el punto de cómo se realiza una crítica o apreciación estética musical.
Históricamente la crítica operística se realiza de la forma que a usted le incomoda. No es un tiro al blanco sino una revisión compacta de lo que cada artista deja en la noche. Una crítica de esta índole no debe ser, por espacio y objetivo, un tratado minucioso que duerma a la mayoría de los espectadores. Para ello a veces se escriben artículos de apreciación o divulgación como puede ver varios ejemplos en este sitio.
Le recomiendo leer a Berlioz (en sus memorias), Debussy en "el señor corchea", las críticas que aparecen en revistas como Pro Ópera, Ópera actual y mi favorita que es "Scherzo". Lea el New York Times y se dará cuenta de esa tradición.
En la ópera una dimensión estética fundamental es el quehacer del artista dentro de la obra. Sin canto no hay ópera. Tampoco sin tradición o sin música.
No sé si usted conozca el estilo mozartiano a fondo pero si es así estará consciente que voces pequeñas como la de Velazco han interpretado el papel de Susanna por años; ahí están las Reri Grist, Irmgard Seefried, Erika Koth, Hilde Gueden por mencionar a algunas. El canto Mozartiano debe ser lo más limpio posible y es por ello que voces que se han ensanchado como la de Ivonne Garza, con un vibrato notorio en el registro medio, trabajan bastante para hacerle justicia a esa perfección de emisión de línea que el genio de Salzburgo exige.
Tiene el derecho de leer lo que guste, no lo puedo forzar a que concuerde conmigo.
Por cierto lo que he puesto en este blog no es una crítica (esa la dejé a El Norte) sino una reflexión en torno a las funciones de "Le Nozze" y lo que estas nos dejaron.
Saludos
Por cierto lo que he puesto en este blog no es una crítica (esa la dejé a El Norte) sino una reflexión en torno a las funciones de "Le Nozze" y lo que estas nos dejaron.
(Entonces de que esta Usted hablando?, por lo mismo he dicho categóricamente que prefiero leerlo en El Norte, porque es ahi donde encuentro coherencia en sus escritos, la manera en como plantea en su blog si es incomoda y poco sustancial.)
En ningún momento mencioné en mis réplicas que la voz de la maestra Velasco fuese pequeña, eso ni al caso viene, al menos en Monterrey no hay nadie que pueda hacer este papel mejor que ella. Se balconea Usted, solo he dejado en claro la estatura real e incuestionable de cada una de estas dos representativas y ejemplares artistas orgullosamente nuevoleonesas.
Marcelo Lucio.
es claro que usted quiere ganar con su punto de vista sin conceder nada dentro de una discusión razonada. Si de esa forma usted está contento de acuerdo.
El malestar que se refleja en sus comentarios me temo que son el resultado de una mala lectura de mis escritos. Es claro que jamás pretendí que los puntos que escribí sobre las bodas de Figaro fueran una crítica. ¿A qué se debe esto? a una cuestión de ética escrita. En este caso El Norte tiene la primicia sobre mi punto de vista. No puedo publicar una crítica aquí y en El Norte porque mi trabajo en El Norte estipula que no puedo hacer dos críticas de un mismo evento que cubra para este periódico.
Usted está diciendo literalmente que " la manera en como plantea en su blog si es incomoda y poco sustancial". Debo de entender que usted ha leído todo lo que he publicado. ¿Me puede decir qué le incomoda de lo que he escrito sobre la sinfonía escocesa de Mendelssohn? ¿Sobre Mireille de Gounod? ¿Qué le incomoda de la apreciación general que hice de Donizetti? ¿Faust de Gounod? ¿Las críticas que he publicado sobre ópera en España? ¿La mansión encantada? ¿Carmen de Bizet? ¿El Elixir en Monterrey? ¿La música de Larrañaga? Sobre Le Nozze di Figaro dígame dónde está la poca sustancia y con gusto elaboro.
Reconozco que usted no se refirió a la voz de Cristina Velazco como "pequeña" lo cual hubiera sido una descripción acertada del instrumento de esta excelente soprano ligera o soubrette.
De hecho usted dijo: "se me hace muy sospechoso de su parte que pondere exageradamente a la Soprano que interpretó el papel de Susana"
Lo interesante es que "la sustancia" que usted tanto predica no se ve en su propio discurso. ¿En qué le parece exagerada mi ponderación de Velazco? ¿Qué puede decir sobre el canto de ella? ¿Qué le parece su técnica? ¿Tiene algúna impresión sobre su "Venite inginochiatevi?"
Le recuerdo: una cosa es el tamaño de voz y otra es la calidad de la voz o del trabajo operístico.
Su primer comentario no parece indicar que Velazco es una artista ejemplar. ¿Qué le parece si elabora una opinión en lugar de estar centrando su disgusto en detalles insignificantes o mal comprendidos?
Ricardo Marcos G.
Muchas gracias por haber respondido tan amablemnente a todos mis puntos, creo que el arte siempre da para discusiones de altura, como nos ha sucedido ahora en su foro, hasta nos hemos regocijado y apasionado con este tema de Le Nozze di Fígaro, admiro y valoro el interés y tiempo que Usted imprime para propiciar este espacio cultural donde el mas alla de nuestras diferencias estéticas nos hace fuerte en una discusión de arte. En lo que se refiere a un analisis sobre la técnica de los cantantes no me considero la persona indicada para definir si esta bien o mal un estilo o ejecución, no soy crítico de arte ni tengo preparación estética para ello, mis apreciaciones son desde la postura de un amante de la ópera y preservador a nivel personal de estos valores artistícos.
Reciba un gran saludo y nos vemos en el próximo debate.
Marcelo Lucio.
Gracias por su comentario. He disfrutado la discusión con usted y quiero subrayar que si en algún punto he mostrado una pasión por defender o exponer un punto no lo tome de forma personal. En parte se debe a que no tenemos una gran oportunidad en Monterrey de entablar este tipo de discusiones. Se necesitan foros de intercambio de opinión.
Creo que hay un enriquecimiento en los puntos de vista y al cuestionar y defender puntos de vista se modifican los propios en cierta medida.
Yo lo motivo a que siga opinando en este sitio, el cual, como se podrá dar cuenta, es libre de expresión (sólo realizo algo de censura cuando hay groserías mal empleadas).
El que sea un amante de la ópera es suficiente para poder expresar y tener sus puntos de vista en el tema.
Espero verlo en otras ocasiones por aquí. Reciba mis saludos cordiales.
Ricardo Marcos G.